Lic. Andrés Delías

 

El tenis es practicado por una amplia gama de personas alrededor del mundo y es el más popular de todos los deportes de raqueta.1 Se estima que solamente en EEUU hay 18 millones de personas que lo practican.2
Un mayor número de competiciones determina un aumento en la dedicación por parte de los jugadores tanto profesionales como amateur.
Con el avance de la tecnología de los últimos años en las raquetas, se han producido modificaciones en casi todos los golpes. Las raquetas más grandes, livianas y duras permiten a los jugadores golpear la pelota con más fuerza y más control1, estos aumentos de fuerza en los golpes producen un incremento de las lesiones tanto en muñecas como en manos.3 En los jugadores no profesionales los esfuerzos realizados para tratar de ejercer una forma de juego más efectiva y agresiva usando técnicas similares a los profesionales no siempre están sustentados por un desarrollo técnico y físico adecuado, por este motivo, cuando existe un desequilibrio entre la potencia de los golpes y el nivel de acondicionamiento físico (fuerza, velocidad, coordinación, flexibilidad) se producen cambios adaptativos que pueden llegar a generar lesiones, tanto por un evento único o por la acumulación de micro traumatismos.1 Cabe aclarar que los tenistas amateur están menos expuestos a lesiones por stress ya que cuando comienza el dolor pueden descansar.

El tenis y la muñeca

La cadena cinética que fluye a través del cuerpo durante el servicio o golpe de fondo permite una efectiva transferencia de energía a la pelota; pie, rodilla, cadera, hombro, codo, muñeca son enlaces secuenciales que absorben, generan y transmiten esta energía, siendo el complejo muñeca-mano el eslabón final entre el cuerpo y la raqueta. Se demostró que en jugadores lesionados la velocidad de la pelota es menor y que la energía absorbida por el codo y por el hombro es mayor en comparación con jugadores no lesionados.3
En el tenis moderno el golpe de derecha (drive) es el más potente y el más empleado, y la muñeca desempeña un papel clave en el desarrollo del momento angular para aumentar la velocidad de la cabeza de la raqueta por lo tanto su papel es primordial en la producción de los golpes.1

Las cargas sufridas por la muñeca en la producción de los golpes parecen estar por debajo del umbral lesivo, pero los efectos acumulativos de la repetición son muy importantes, especialmente cuando el tiempo de adaptación y preparación son escasos o también asociado a la ejecución técnica pobre. La evidencia afirma que la mayoría de las lesiones de la muñeca están relacionadas con el uso excesivo, dada por la interacción entre la carga y la repetición y rara vez figura en la literatura lesiones de muñeca por causa traumática, (más allá de una caída sobre la muñeca en extensión).2
Kibler et al. Mencionan que las lesiónes de muñeca representan el 30,8% de las lesiones del miembro superior.
Sell et al. Encontraron que las lesiones de muñeca en jugadoras representó el 13,6 % de todas las lesiones del miembro superior incluso mayor al hombro.

Entre los factores predisponentes más comunes podemos citar: jugadores físicamente inmaduros (especialización temprana en el deporte) combinados con un entrenamiento inadecuado con escasa recuperación, lo que sería un incorrecto manejo de las cargas de entrenamiento. Otro de los factores predisponentes es el empleo de una mala técnica que aumente la magnitud de cargas transferidas a la muñeca, así también el uso de diferentes cuerdas, y por último el tipo de empuñadura o grip que use el jugador
Con respecto a las diferentes empuñaduras usadas tenemos que considerar las siguientes:

  • Continental
  • Oriental
  • Semi Occidental
  • Occidental

 

En la imagen se muestra empuñadura oriental (a) , empuñadura continental (b)

La carga entregada a la muñeca durante el golpe de derecha (drive) varía según el tipo de empuñadura.3 Diferentes investigaciones relacionan las distintas lesiones de muñeca de acuerdo al tipo de agarre o grip que cada jugador emplee en su práctica deportiva.
Las empuñaduras occidental y semi occidental se relacionan con lesiones del lado cubital, por su parte la oriental se asocia a lesiones del lado radial de la muñeca, así lo refleja el estudio hecho por Tagliafico y cols en el cual se encuestan a 370 tenistas de la III y IV división de Italia donde se pudo aseverar estas relaciones.3

Dentro de las lesiones más comunes del lado radial de la muñeca podemos encontrar las siguientes:
Tendinopatía del 1º compartimiento dorsal (tenosinovitis de Quervain): es una patología caracterizada por inflamación y engrosamiento de los tejidos peritendinosos del abeductor largo y extensor corto del pulgar, con un severo dolor en la estiloides radial, dificultando las actividades del pulgar y una disminución de la fuerza.

Síndrome de intersección: patología en donde el primer y segundo compartimento sumado al extensor radial largo se cruzan 4 cm por encima de la muñeca generando dolor y crepitación tanto a la flexión como a la extensión de muñeca.
Fractura por estrés del escafoides: lesión por microtraumatismos repetidos asociado a dorsi flexión de la muñeca, y dolor en la cara dorsal de la muñeca y sensibilidad en la tabaquera anatómica.

Dentro de las lesiones más comunes del lado cubital encontramos las siguientes:
Patología del ECU (extensor cubital del carpo): es una de las afecciones más comunes del dolor cubital en tenistas, esta patología puede incluir al tendón o a su vaina fibrosa, en las cuales encontramos tendinopatías, tenosinovitis, desgarros y hasta rupturas que predisponen a la subluxación del tendón durante los movimientos. Una de las características de estos trastornos es que se pueden dar en la muñeca dominante como así también la muñeca del lado no dominante. Esta última en jugadores con revés a dos manos1,2,3 manifestandose entre otras cosas con dolor, chasquido, e inflamación que aumenta con la flexión, desviación cubital y supinación.

Lesión de Fibrocartílago Triangular: estructura encargada de dar estabilidad a la articulación radio cubital distal, la lesión puede ser aguda o degenerativa, dando como resultado un deterioro funcional relacionado con dolor de muñeca del lado cubital y disminución de la fuerza de agarre. Los pacientes refieren dolor cubital que aumenta con los movimientos de carga y rotación de la muñeca. La supinación repetida del antebrazo o pronación con la muñeca extendida predispone a la lesión.3
Síndrome de impactación cubital: patología caracterizada por fuerte dolor cubital en la muñeca que resulta del impacto directo del extremo distal del cubito sobre el carpo en pacientes con varianza cubital (+). Palmer y Werner aseguran que la transmisión axial aumento de 18% a 42% con solo 2,5mm de varianza cubital (+) a veces esta patología viene asociada a lesión del fibrocartílago triangular.
Fracturas del gancho del hueso ganchoso: esta lesión es el resultado de una caída con la mano en extensión, o microtraumatismos repetidos de impactos sobre el mango de la raqueta sobre la eminencia hipotenar.

Conclusión:

Los cambios en la tecnología de las raquetas, las empuñaduras y el aumento de las fuerzas generadas durante los golpes vienen acompañados con un incremento de las lesiones de muñecas y manos. La comprensión detallada de las estructuras anatómicas en riesgo puede mejorar la precisión del diagnóstico y el tratamiento adecuado, así como también ayudar a la prevención de la aparición de la lesión.

 

Bibliografía

  1. Tagliafico AS, Ameri P, Michaud J, Derchi LE, Sormani MP, Martinoli C. Wrist
    injuries in nonprofessional tennis players: relationships with different grips.
    Am J Sports Med. 2009 Apr;37(4):760-7.
  2. Stuelcken M, Mellifont D, Gorman A, Sayers M. Wrist Injuries in Tennis
    Players: A Narrative Review. Sports Med. 2017 May;47(5):857-868.
  3. Gil JA, Kakar S. Hand and Wrist Injuries in Tennis Players. Curr Rev
    Musculoskelet Med. 2019 Jun;12(2):87-97.